Presentes: Luna Nueva, Vida y Educación, Gurises Unidos, División Convenios, Coordinación Técnica Red extremos, Trampolines El Abrojo, Programa Calle, Regional Este.
La reunión tiene como objetivo central, el analizar las experiencias de los Dispositivos Puente.
El grupo de trabajo de Monitoreo y Seguimiento de la Red de Atención a situaciones de calle de extrema vulnerabilidad, propone intercambiar sobre algunos puntos, en calidad de “previos”. Por tanto, la reunión tiene dos momentos.
a) Marina Cal informa que próximamente se integrarán a la Red dos psicólogos para la atención a los niños y adolescentes, y dos para el trabajo con los equipos. En los primeros días, realizarán tareas de aproximación y conocimiento de los proyectos.
b) El grupo de Seguimiento y Monitoreo de la Red, plantea la preocupación respecto a los lugares de acogimiento nocturno. Dicha preocupación tiene dos tipos de formulaciones:
– Si bien se valora la apertura de Casa del Camino como espacio de Acogimiento, se plantea que su modalidad de funcionamiento, (en tanto exige que el niño o el adolescente vaya acompañado por un educador que pernocte), genera exigencias para los equipos de calle, en tanto el educador que debe dormir con el niño, luego no podrá estar en las actividades diurnas.
Surge la pregunta de si no se podría destinar a casa del Camino, a los educadores seleccionados en su momento para integrar el hogar de calle ( que no se ha puesto en funcionamiento).
-Se visualiza que puede no haber cupos suficientes cuando se los requiera. Se pone como ejemplo que si bien Posada de Belén “liberaría” camas de emergencia al ponerse en funcionamiento la casa del Camino, algunas veces sucede que los proyectos tienen dos o tres adolescentes para ingresar en la noche, lo cual es muy difícil de recepcionar para Posada de Belén, sin impactar negativamente en la dinámica del hogar.
Casacha plantea que actualmente está siendo una fuerte preocupación del proyecto, el contar con acogimiento nocturno sobretodo en noches muy frías o con alerta meteorológica.
La Coordinación Técnica de la Red, plantea la necesidad de dimensionar el problema que se plantea, para poder proyectar mínimamente qué cantidad de cupos se requieren. Por otra parte, existiría disposición a pensar la atención de la necesidad planteada, pero esto sería pensado, por fuera de la responsabilidad de gestión de la Red.
DISPOSITIVOS PUENTE.
Para trabajar sobre este punto, se plantea que el Proyecto Mamboretá de Luna Nueva (Solymar) y Trampolines de El Abrojo (Las Piedras) realicen una breve exposición, sobre la cual luego se intercambia a nivel colectivo.
La dinámica que resulta, es de un intercambio de preguntas y respuestas, que va permitiendo acceder a información descriptiva del funcionamiento, así como ir ingresando a niveles de análisis.
A continuación se plantean puntos abordados, en modalidad de esquema.
- Ambos proyectos señalan como riesgoso, el tomar para el análisis los “dispositivos puente” en forma aislada, y no el funcionamiento de un proyecto global (centro juvenil o club de niños), que cuenta con un dispositivo puente. En este entendido, plantean que no se limitarán a describir el dispositivo en sí, sino que tomarán a los proyectos en su globalidad.
- Qué decimos cuando hablamos de propuestas con dispositivos puente? Nos referimos a una modalidad de abordaje dirigida a niños y adolescentes con experiencia en calle o situaciones de riesgo específicas. Son centros que trabajan en inclusión socioeducativa, asegurando VIAS DE ACCESO para un grupo de población que en general queda fuera de las propuestas.
En general las propuestas tienen anclaje en zonas comerciales, así como posibilidad de insertarse en la red comunitaria, y dar rápida respuesta a demandas de la comunidad.
Se asume entonces operar en el escenario de calle, local, centros comunitarios.
- Ambas propuestas tienen en común el hecho de operar en zonas de relativa concentración urbana y de servicios. Allí se puede prescindir del rótulo- problema “niño en situación de calle”, y se toman situaciones de alta vulnerabilidad. De alguna manera se visualiza positivamente, no ser un “proyecto calle”, ya que ello abre a otras miradas e intervenciones.
- Ambas propuestas destacan como positivo el contar con un equipo “móvil” no atado a horarios de funcionamiento de centro. Esto permite hacer recorridas en la noche, o flexibilizar horarios para llegar a los niños en los lugares y horas en que se sepa uqe están.
- Se destaca que estas propuestas toman aspectos metodológicos de los PROYECTOS CALLE ( en cuanto a plasticidad, movilidad, creación de la demanda, etc.) y de PROYECTOS DE CENTRO. Generando una suerte de figura nueva en el “medio” de ambas dos. Surge la pregunta de si es necesario generar un tercer tipo de servicio, o habría que incorporar modificaciones a los perfiles de los proyecto calle y a los de los clubes de niño o centros juveniles.
- Se destaca como elemento positivo, el hecho de que el mismo proyecto sea quien realice la captación, y luego el trabajo en el centro. Esto le daría integralidad al proceso. En el caso de Luna Nueva, se cuida que los equipos del centro y del dispositivo puente, no sean separados y estancos. Para ello se plantean un sistema de rotación de los recursos, donde el operador “de calle” o a la externa, tiene días de actividad en el local. Eso les permite recepcionar en el local, al niño que se captó en espacios comunitarios. También se señala que esto “ahorra” tiempo de pasaje de información, ya que quien coordina en la escuela por Pedro, es quien trabaja con Pedro, etc. De lo contrario, se deben generar mecanismos de transferencia de información por cada niño, por cada espacio. Esto que se visualiza como ventaja, también puede ser un riesgo, en cuanto a que armemos una suerte de “tubo” donde el que capta, ingresa al niño y etc. , personalizando demasiado las referencias.
- Se señala que este tipo de funcionamiento, es similar a los proyectos calle que operan a nivel barrial, con referencias locales. También que a lo largo del tiempo, los proyectos calle han mantenido la tensión entre el “adentro” y el “afuera”, el tiempo requerido para captar, el riesgo de meterse para adentro en el local, y perder de vista la calle, etc.
- Trampolines plantea que a nivel metodológico hay variaciones en relación a los proyectos calle. Con ello refieren a que no trabajan consolidando una “grupalidad” en calle, para luego “pasarla” a trabajar en el local. Apenas se capta un niño o adolescente, este ingresa a la propuesta de local.
- Desde el Programa Calle, se destaca la experiencia positiva de articulación con Trampolines. Se expresa: “ esto es lo que precisamos los proyecto calle”, una propuesta en comunidad que “reciba” al gurí, que lo busque, y haga el esfuerzo porque se quede en el barrio.
- Finalmente, si bien se ven las virtudes de un funcionamiento de este tipo, se señalan los riesgos de “eternizar” a los niños en clubes de niños. Así como no nos interesa que los niños permanezcan demasiado tiempo en los proyectos calle, también debiéramos cuidar que permanezcan demasiado tiempo en un club de niños, que no deja de ser una estructura focalizada en un grupo poblacional.